Bienvenidos de nuevo a nuestra serie sobre finanzas personales.
¿Estás preparado para enfrentar imprevistos sin comprometer tu estabilidad económica? Sigue leyendo.
Si aún no has leído el post anterior sobre el ahorro, te recomiendo hacerlo ahora (pincha aquí). Ahorrar es solo el primer paso en tu viaje hacia la construcción de un patrimonio sólido. Hoy profundizaremos en un concepto crucial que todo ahorrador debe conocer: el colchón de emergencia.
Cuando has constituido el hábito de ahorrar, el primer objetivo antes de invertir será conocer cuál es tu colchón de emergencia o margen de seguridad.
¿Qué es el margen de seguridad o colchón de emergencia?
Es aquella cantidad de liquidez que dispongo para poder aguantar imprevistos, ya sean de gasto o ingresos, sin incurrir en deudas ni deshacer inversiones que quiero seguir teniendo.
Imprevisto de gasto → aquí entraríamos en desembolsos en emergencias médicas, reparaciones urgentes (hogar, coche), ayuda financiera a familiares, gastos inesperados significativos (legales por ejemplo), etc.
Imprevisto de ingresos → cuando dejamos de ingresar dinero por cualquier motivo, despido, cierre de la empresa o mismamente quieres dar un cambio en tu vida.
Lo recomendable es que tengas como mínimo 6 meses de gastos en líquido. Hay dos tipos de gastos: los fijos y los variables.
Fijos → alquiler/hipoteca, seguros, comida, salud, alimentación… Como podrás ver son los gastos más importantes que tenemos que cubrir.
Variables → ocio, suscripciones, ropa… Hay una infinidad de gastos que van muy asociados a cada persona.
Cómo calcular tu colchón de emergencia
Una vez analizados los gastos y llevando el control de los mismos podemos establecer cuál es nuestro colchón de emergencia.
Antes de ver el ejemplo, es importante que comprendas que mientras más gastos metas de tu día a día en tu colchón de emergencia, tendrás mayor capacidad para hacer frente ante un imprevisto y podrás mantener tu nivel de vida lo más parecido a cuando tenías esos ingresos. Lo que sí es obligatorio es que los gastos que consideres fijos estén representados en tu colchón.
Además, es importante entender que el margen es dinámico, a lo largo de tu vida los gastos asociados a ella van cambiando, por lo que deberás revisar este margen cada cierto tiempo (aconsejable 1 vez al año).
Veamos un ejemplo:
Hugo, de 34 años, tiene los siguientes gastos mensuales:
Alquiler → 750€
Coche (gasolina, seguro y mantenimiento) → 150€
Comida → 300€
Seguros → 80€
Gastos varios y ocio → 600€
Gasto mensual= 750+150+300+80+600= 1880€
Colchón de emergencia mínimo= alquiler + coche + comida + seguros= 750+150+300+80= 1280€.
Por lo que tendríamos que coger los 1280€ y multiplicarlo por 6 meses.
1280 x 6= 7680€
El colchón de emergencia mínimo para Hugo sería de 7680€
Colchón de emergencia óptimo, aquí meteremos todos los gastos.
1880 x 6= 11280€
Como puedes observar la cantidad es variable en función del nivel de vida de cada persona: el colchón que decides formar varía en función de si quieres que sea lo más realista a tu nivel de vida o simplemente que cubra tus gastos fijos.
Así que una vez entendido el colchón de emergencia es importante que pienses cuál es el tuyo y te comprometas contigo mismo a cumplirlo.
Reajusta el colchón
Es aconsejable que año tras año ajustes el colchón, haciendo un análisis de los gastos. Una vez tenemos el análisis completado, comparamos con lo que tenemos, si es correcto se deja y si no debes modificarlo (sobre todo si tus gastos han aumentado).
También debes revisarlo si tus gastos cambian sustancialmente (sobre todo si se incrementan) en cualquier momento.
Cuestiones recurrentes
Una duda recurrente suele ser “¿Cuál es la cantidad máxima que debo tener como colchón?”. No hay respuesta definida, al igual que como mínimo deberías tener esos 6 meses de gasto, por arriba es a gusto de cada cual. Lo que es importante que sepas es que llega un punto que el coste de oportunidad de aumentar el colchón empieza a ser grande, por lo que empezamos a ser ineficientes.
Yo diría que una cantidad cercana a los 20.000€ representa, para la gran mayoría, un buen colchón de emergencia.
Otro punto a tener en cuenta es dónde alojo ese margen de seguridad, cómo combato la inflación, etc.
La primera cosa que debes hacer es tener el colchón de seguridad en un producto financiero solamente para este fin, no lo mezcles con tus cuentas corrientes del día a día ya que puedes romper esa disciplina de gasto con más facilidad.
Cómo combato la inflación
El objetivo con la inflación será obtener una rentabilidad parecida a ésta. La pregunta es ¿Qué opciones tengo para lograr ese objetivo?, pues depende en mayor medida de los tipos de interés fijados, ya que en función de estos los bancos ofrecerán cuentas remuneradas/depósitos con una rentabilidad mayor y, a la vez, los fondos monetarios también ofrecerán mejor rentabilidad.
Las dos mejores opciones que hay actualmente son las siguientes:
Cuentas remuneradas → entidades bancarias ofrecen una rentabilidad a tu dinero a cambio de que abras una cuenta con ellos y deposites ahí tu dinero. (MyInvestor, Trade Republic, Sabadell, Openbank…)
Fondos monetarios → fondos de inversión que invierten en deuda a corto plazo de países y/o compañías de alta calidad.
Estos productos son buenos para alojar el colchón de seguridad ya que no tienes el riesgo de precio/volatilidad de mercado y son completamente líquidos (la cuenta remunerada sería algo más líquida ya que en el fondo monetario deberías realizar una venta de tus participaciones).
Otro producto interesante sería los depósitos a plazo fijo, aunque me parecen mejores los comentados arriba por la liquidez.
Normalmente son productos ilíquidos hasta que ha pasado el periodo de contratación (3 meses, 6 meses, 1 año), ya que la rentabilidad se suele pagar tras haber cumplido el periodo contratado y en algunos casos tienen una penalización por cancelación anticipada. Si obtienes un muy buen depósito y crees que es una buena oportunidad asegúrate de que no tenga penalización por cancelación anticipada.
Si decides dejar el colchón de emergencia sin remunerar, lo que te ocurrirá es la pérdida de poder adquisitivo del mismo: al cabo de 10 años habrás perdido un 25% si la inflación se mantiene en torno al 2% (objetivo del Banco Central).
Punto clave
Una duda recurrente es: ¿Cuándo empiezo a invertir?, la respuesta siempre es la misma “crea tu margen de seguridad primero”.
Esto tiene que ser como un dogma para el nuevo inversor/ahorrador.
La explicación es sencilla y la mejor forma de verlo es con un ejemplo:
Imagina los gastos que hemos comentado antes de Hugo, y vamos a coger un margen de seguridad completo, esto es 11.280€.
Pues Hugo debería empezar a invertir cuando haya conformado ese margen de seguridad, ya que si no lo hace y empieza a invertir directamente puede incurrir en una de los imprevistos comentados antes. Esto le llevaría a tener que vender las inversiones que tuviera en un corto plazo, cuando lo recomendable para toda persona es invertir a largo plazo.
Al haber tenido que deshacer la posición a corto plazo en un activo en el que la idea principal era la inversión a largo plazo, puede haber hecho la venta de la posición con un resultado desfavorable, ya que el corto plazo es incierto.
En este cado incurre en dos pérdidas:
La pérdida ocasionada al haber vendido una posición en pérdidas.
El coste de oportunidad de no haber seguido invertido y en consecuencia la futura revalorización.
Lo correcto sería tener el margen de seguridad y una vez lo completas, empezar la estrategia de inversión que hayas establecido.
Cada colchón de emergencia es único en relación a cada persona.
Conclusión
Analiza tus gastos y configura tu margen de seguridad.
Invierte una vez hayas constituido tu margen de seguridad.
Se responsable con tus finanzas.
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Ahora que conoces la importancia de tener un colchón de emergencia y cómo calcularlo, es tu turno: actúa. Analiza tus gastos, establece tu fondo de seguridad y avanza hacia la creación de un patrimonio sólido. Si este post te ha sido útil, no olvides darle like y suscribirte para más consejos financieros. ¡Hasta la próxima, donde hablaremos sobre cómo dar tus primeros pasos en el mundo de la inversión!
Un cordial saludo.
MMR Financial Consulting